Sorprende el escaso nivel de responsabilidad de determinados grupos de jóvenes ante el final del estado de alarma. La gente se sigue infectando y muriendo en las UCIS de nuestros hospitales. Algunos lo ignoran o no quieren enterarse y se lanzan a la calle a "disfrutar", de forma alocada, sin respetar las distancias, la cantidad de personas agrupadas y sin mascarilla. Es lamentable, muy lamentable. No sé si algunas de estas personas sabrán lo que es perder un ser querido. Me cuesta creerlo. Una amiga me comentaba el domingo si nadie les había enseñado a usar su libertad adecuadamente. Es muy doloroso e indignante ver comportamientos semejantes. Espero que en algún momento se den cuenta de su error, recapaciten y rectifiquen.
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