Nueva jornada cimera, tras la Globesleck 200 de La Rioja, en la que realizamos una nueva incursión en Andalucía, para echar a nuestro zurrón dos nuevas conquistas: Pontones en Jaén y La Losa en Granada. No son estas fechas las más adecuadas para aventurarse en bici por tierras andaluzas, y bien que pagamos el atrevimiento, pasando mucho calor y alguna que otra situación de apuro felizmente solventada gracias a Dios. El plan era, saliendo de la localidad jienense de Hornos, en plena sierra del Segura, ascender el puerto de Pontones y llegar a la localidad de Santiago de la Espada, para desde ahí, tomar dirección a la provincia de Granada, ascendiendo el puerto de La Losa. Una vez coronado, regresaríamos por el mismo sitio.
En el perfil del Garmin se aprecia la irregular ascensión a Pontones, con una primera parte durísima y dos descensos agridulces, porque cortan el ritmo de subida y, a la vez, permiten recuperar. Tras unos 8 kms de descenso, se afronta la ascensión a La Losa, de más a menos, con una primera parte más dura y más escénica. El regreso, por el mismo itinerario, se haría especialmente duro a causa del intenso calor.
Me recoge Rafa a las 6:00 en la puerta de mi casa y ponemos rumbo a Jaén. Por el camino contactamos con Pedro, que sale desde Cabra (Córdoba), para realizar la ruta con nosotros. Poco antes de llegar a Hornos, impresiona la mole del Yelmo, otro gran cima que espera paciente una cita con nosotros:
Llegamos a Hornos, nos cambiamos y tras hacernos la foto de salida con el Yelmo a nuestra espalda, nos ponemos en ruta a las 10:15, un poco tarde. Es lo que tiene tener tan lejos de casa los cimas y no hacer noche. Gajes del oficio:
Acabamos de salir, en descenso, con el pensamiento de que a la vuelta pasarán factura estas rampas. El precioso valle del joven Guadalquivir, embalsado en el pantano del Tranco, muy mermado por la persistente sequía, nos da la bienvenida en un paraje en el que el pinar convive en armonía con el olivar:
El pueblo de Hornos queda atrás, erguido sobre la colina, manteniéndose visible durante un buen rato, hasta que coronemos ese primer y duro tramo de ascensión a Pontones. Esa rampa de entrada al pueblo, con un 17%, nos pondrá a prueba al regreso:
Plácida aproximación al comienzo del puerto, llana e incluso en descenso, disfrutando de estas primeras pedaladas:
Perfil de Pontones elaborado por Miguel Baeza y Martín Cerván, que figura en el listado del Reto Cima de la página de Altimetrías de Puertos de Montaña:
Primeras y durísimas rampas, con un 10-12% mantenido durante 3 kms:
Ganamos altura con rapidez. Hornos aún se adivina en el horizonte:
Coronamos este primer tramo y obtenemos el premio en forma de atractivas vistas de la sierra del Segura:
Pontones es un puerto que no defrauda, muy atractivo, de los que me gustan, por no tener pendientes extremas y ofrecer buenas vistas. Un puerto para disfrutar:
Las vistas se abren una vez más cuando estamos cerca de coronar Las Tejoneras, segunda cota del puerto:
Coronada esta segunda parte de la ascensión, breve descenso al valle del Segura y alcanzamos la localidad de Pontones, que da nombre al puerto, donde nos tomamos la foto a falta de cartel de puerto:
Poco antes nos habíamos aprovisionado de agua en esta milagrosa fuente de Pontón Alto:
Abandonando esta pequeña pedanía, llaman la atención las caprichosas formas rocosas que se levantan sobre el valle del recién nacido río Segura:
A la salida de Pontones disfrutamos de unas bonitas vistas tras ganar altura en el inicio de la tercera parte del puerto. La carretera de la izquierda se dirige a las Fuentes del Segura, nacimiento del río. Nosotros venimos del angosto cañón de enfrente:
Sorprende la última parte de la ascensión, que a estas alturas empieza a ser exigente. En teoría es más suave que lo anterior, pero las piernas empiezan a notar el desnivel acumulado y la sensación es de dureza:
El firme es bueno, lo que permitirá disfrutar del descenso en su momento.
Hemos coronado la cota final del puerto, sin encontrar ningún cartel. Llevaba la esperanza, casi seguridad, de que Manel (Jose Manuel Gómez Mollet) habría dejado su huella en forma de la palabra CIMA, escrita con spray blanco, pero se ve que aún no había iniciado esta feliz idea que tantas cimas sin cartel nos aclaró:
Descendemos a Santiago de la Espada y nos apretamos unas buenas cervezas en la gasolinera. El intento fue de coca colas, pero Rafa no tuvo que esforzarse mucho para convencerme. Eso sí, Pedro se tomó un acuarius.
Perfil de La Losa que figura en Listado de puertos del Reto Cima de la página Altimetrías de Puertos de Montaña
Dejamos atrás Santiago de la Espada y seguimos descendiendo al valle del río Zumeta, del que más abajo arrancan los cimas de Marchena y Lastonar. Antes del descenso al río, desde un promontorio, disfrutamos esta vista de Santiago de la Espada y la vertiente de Pontones sur:
El descenso al Zumeta es de una especial belleza:
Ganamos altura con rapidez. Es la parte más escénica del puerto. Se disfruta mucho con las continuas vistas a los tramos de carretera que van quedando abajo:
Pero el calor sacude sin piedad. Mi garmin marca continuamente entre 34º y 37º. Esto, unido al cambio de asfalto tras abandonar la carretera de Puebla de Don Fadrique, hacen de la ascensión una dura prueba en este caluroso agosto. Rafa es un titán. No lleva ni 1500 kms este año y su última salida fue la Globesleck 200. Ahí le vemos negociando estas rampas con entereza:
Coronamos y Pedro señala con su índice la mítica montaña de enfrente, La Sagra. Dicen los andaluces que se ve desde gran parte de Andalucía:
Rafa llega muy tocado y nos anuncia que no hará la vuelta completa. Su objetivo era sumar los dos cimas y está cumplido:
Hemos coronado con dos dedos de agua en el bidón/es (yo voy con uno de 2/3 de litro). No hay ninguna fuente. La situación es delicada. Comenzamos el descenso administrándonos el agua que nos queda con cuentagotas. La necesidad agudiza el ingenio y descubro que manteniendo una poca cantidad de agua en la boca, los labios no se resecan y el paladar se mantiene fresco y húmedo, disminuyendo la sensación de sed. De esta manera alcanzamos el único tramo de subida que hay en este descenso, en el que aparece una furgoneta de frente, furgoneta que paro con grandes movimientos de brazos. Le pedimos agua y ¡¡¡nos da una botella de litro y medio !!! Esto es una obra de caridad en toda regla. Nos ha sacado del apuro y desde este blog agradezco enormemente este gesto a la persona que nos socorrió. Continuamos el descenso y paro a fotografiar estas hermosas vistas, con Santiago de la Espada al fondo y unas curiosas cuevas sobre el cauce del Zumeta, que, tras investigar un poco en internet, concluyo que son las Cuevas del Engarbo, con pinturas rupestres prehistóricas:
Alcanzamos de nuevo el puente sobre el Zumeta...
...y su posterior escalada deja tocado a Rafa, que tiene que parar por calambres en los muslos. Le dejamos en una zona de sombra y alcanzamos unas casas en las que nos dan toda el agua que queramos. Satisfacemos nuestra necesidad y llenamos bidones para volver junto a Rafa y proveerle del líquido elemento. Se recupera un poco y ascendemos hasta Santiago de la Espada, donde nos tomamos unas buenas cervezas y bocatas:
La ascensión a Pontones sur se hace dura a estas horas de la tarde, pero a mí, las paradas a reponer fuerzas, con cerveza y bocatas, me sientan de maravilla. En Pontones hubo que rellenar bidones y disfrutando de un placentero descenso, llegábamos a Hornos sobre las 19:00 horas, con la dura tachuela de ascenso al pueblo cobrándose su venganza, jajaja:
Agradezco a mis compañeros su agradable compañía y les muestro mi admiración por su pundonor.
También agradezco a Pedro la cesión de sus fotos para esta crónica.
Hasta la próxima, que llegará.
Juanma cumplía años, sirva esta foto de homenaje. ¡¡¡Felicidades !!!
Dos días después salíamos el grupo de la imagen y tomábamos unos cafés en Colmenar de Oreja:
La cosa acabó en casa de Antonio Carpintero...jugando al mus, jajaja. El gordito y yo dábamos cinta pal pelo a Carpintero y Pablo, conste:
De ese día es esta foto en la carretera de Villaconejos a Colmenar, en obras. Hubo que cargar con las bicis al hombro para evitar caídas junto a las máquinas:
Salida del domingo 11 de agosto de 2019:
Foto de grupo en el alto de La Radio:
...y foto en la parada de Valdilecha. Juan Jesús y su amigo Fabián no pararon por tener prisas el primero, pero les cogimos en la autovía de la Warner, por lo que su prevención resultó infructuosa:
Rematamos en los 100 montaditos de la zona de Brezo:
Salida con Víctor del martes 13 de agosto de 2019:
Agradable salida, en la que apenas pude sujetar a Víctor, que me llevó con la soga al cuello:
Bajando de Colmenar por el Chorizo, nos asomamos a ver el arreglo final de la carretera de Villaconejos. Una pena. No han barrido la gravilla. Un peligro circular porque caerte es lo más fácil que te puede pasar:
Salida del domingo 18 de agosto de 2019:
Óscar, Puerma y Pilar, coronando la cuesta de la Residencia:
Foto de grupo en Arganda. Falta Ángel, que se volvió en Morata:
Descenso de Valdilecha a Tielmes:
Parada en Tielmes:
Reagrupamiento en la cima de La Yesera:
Fin de fiesta en 100 montaditos:
... Diego Todón, que ascendió Honduras por el Jerte nada menos que con la plegable. Un crack...
...Julián Caballero subiendo todos los puertos de la sierra madrileña...
...y Héctor, el de Quiroga, el pulga, atreviéndose con un coloso como el Teide:
¡¡¡ Enhorabuena a todos !!!
PRÓXIMA SALIDA:
DIA 25/8/2019 RUTA A CHINCHÓN, PERALES Y ARGANDA
SALIDA: 8h.
KMS: 108
DESNIVEL: 918 m
PARADA: ARGANDA DEL REY (gasolinera salida)
RECORRIDO:
VALDEMORO 0
CIEMPOZUELOS 8
GASOLINERA MORATA 25
LOS MOLINOS-CHINCHÓN 35
VALDELAGUNA 40
PERALES DE TAJUÑA 50
ALTO DE PERALES 55
ARGANDA 68
LA RADIO 77
SAN MARTÍN 88
ALTO DE LA YESERA 93
Gracias Gorgonio por la crónica y las fotos. Encantado de volver a la grupeta después de un mes vacacional fuera, donde como no podía ser de otra manera me llevé mi Brompton para no perder el golpe de pedal. Esa bici de ruedas pequeñas y plegable es una maravilla. Cierto que cuesta andar un poco más que con la flaca pero ya hemos subido algunos puertos juntos, para sorpresa de algunos que me han llegado a decir que si tenía motor o si estaba haciendo algún tipo de promesa por subir con esa bici.
ResponderEliminarLa ruta de este domingo pasado con la grupeta se me hizo un poco larga y calurosa. Iremos aclimatándonos poco a poco.
Hasta la próxima.
¿Tú con motor ? Jajajajaja...
EliminarSon las rutas más serias de la temporada, Diego. Pronto te aclimatas. En septiembre iremos reduciendo la dificultad.
Siempre estás ahí, aportando soplos frescos a las crónicas. Gracias, majo.
Estáis que arrasáis, así da gusto. Hay que echarle bemoles para ir a Jaén/Granada en agosto. Os imagino parando al de la furgoneta,jajaja
ResponderEliminarMe apunto el truqui de enjuagar la boca, ;-)
Máxima actividad en la grupeta, Joseba. Como corresponde a la época estival.
EliminarPues, sí, bemoles y sostenidos le echamos en Jaén. Hay que aprovechar cualquier oportunidad de salir de la rutina. Me puse en el centro de la carretera. Había que pararla porque Rafa estaba muy tocado.
El truco de enjuagarse la boca funciona. Antes se me quedaba la boca tan seca que se me pegaba la lengua al paladar y los labios entre si.