Ciclistas de Valdemoro: El Arenal norte, El Bellotar, El Arenal sur y Las Crucetas

Poco que contar de nuevo. A mi inactividad hay que sumar la incertidumbre del tiempo atmosférico, que lleva a hacer y deshacer planes continuamente.

De esta semana, tan solo tengo imágenes de la salida que hicieron el lunes 25 de noviembre de 2019, Carpintero, Víctor y Reboxo, con pinchazo de Antonio:

Aprovecho la inactividad para publicar algunas de mis andanzas, que ya estaban en la antesala del olvido. Fue allá por el 31 de marzo de 2018. Me acerqué hasta Riópar (Albacete), con intención de acabar la provincia de Albacete y la Comunidad de Castilla La Mancha, del reto Cima. Tan solo me quedaban 5 puertos albaceteños. Mi despiste me jugó una mala pasada al no desviarme en La Solana hacia Villanueva de los Infantes. No me sonaban los paisajes que se me presentaban y me vi en Ruidera, fuera de ruta. El despiste me hizo perder una hora que notaría al final con apuro.
Llegué a Riópar a las 9:30 y sobre las 10.00 de la mañana me ponía en marcha hacia el puerto de El Arenal. Carretera llana al principio, perfecta para calentar:

Enseguida, la pendiente se puso en un 3-4%, con la mole del Cerro de la Torca Honda, también conocido como El Padroncillo, de 1586 metros de altitud, casi siempre en el horizonte:

Esta vertiente de El Arenal es corta y llevadera, un tercera, sin más. Tras coronar, dirigimos la vista hacia el valle del Guadalimar, con la Peña Cambrón al fondo:

Descendemos la vertiente cima del puerto de El Arenal hasta el desvío a Villaverde de Guadalimar:

Nos paramos a disfrutar de este precioso valle, con La Sarga (1769 m) y El Padrón (1752 m) en lontananza. Las casas de Villaverde de Guadalimar asomaban en el fondo del valle:

En Villaverde de Guadalimar comenzamos el puerto de El Bellotar, de los más bonitos que he subido en Albacete:

Tras el paso por Villaverde de G., otra mole impresionante, la Piedra del Cambrón, de 1552 m, parece salirnos al paso:

Hemos superado dos kms con cierta dureza y un descansillo nos permite disfrutar del entorno:

El invierno se hace de rogar, sin dar paso a una primavera ya vigente, mientras nos acercamos a El Bellotar, población serrana que da nombre a esta ascensión:

En El Bellotar nos encontramos con la parte más dura del puerto, una rampa sostenida al 10%:

Ganamos altura y las vistas sobre el pueblo se hacen atractivas...

...mientras las herraduras rompen la monotonía de la ascensión:

Precioso rincón de la geografía española, tranquilidad absoluta:

Solo el canto de los pájaros y el olor a pino acompañan el cadencioso pedaleo...

...hasta coronar esta bella cota albacetense:

Regresamos por el mismo sitio para añadir al zurrón la vertiente cima de El Arenal, alcanzando el cruce antes citado y tomando a la izquierda :

Se trata de una ascensión algo sosa, muy rectilínea, con pocos alicientes:

El Padroncillo marca el final de este puerto, que te sabe a poco tras haber disfrutado tanto en El Bellotar:

Vamos a por el tercero del día, Las Crucetas:

Puerto muy corto y con carretera general de tráfico frecuente, eliminado del Cima al haberse encontrado un puerto de más tronío, El Lastonar, más bonito y tranquilo. Pero yo, un poco rebelde, me quiero aprovechar de las circunstancias, pretendiendo cerrar Castilla La Mancha como lo hicieron otros muchos, argumentando mi acción en el agravio comparativo que supone el no poder aprovecharme de la cercanía que a otros les dio tanto juego. Lo hago casi convencido, pero la polvareda levantada me haría esperar a la conquista de El Lastonar en una jornada posterior. Pero en el día de la fecha, fui a por todas.

Salgo de Riópar por una calle que imagino tan bella en verano, con esos plátanos tan gruesos creando un túnel vegetal: